Días de lluvia: andar o no andar en bici... ese es el dilema

Como recién se largó a llover a lo pavote y estoy pensando en cómo hacer para usar la bici para ir hoy sábado a mi clase de comedia musical, busqué tips para andar bajo la lluvia. Aquí los comparto:

Vestite para permanecer seco. Tener frío y estar mojado es la mejor manera de enfermarse. Usá un piloto o impermeable a prueba de agua. Sí, que no deje pasar ni una gota. Son costosos, pero valen la pena. Si este capa tiene manera de “respirar” entonces tampoco llegarás húmedo “por dentro”. La tecnología Gore-Tex es una opción. Cubre tus zapatos con botas de neoprene o cubre zapatos – se consiguen en los supermercados -y tus manos con guantes resistentes al viento y al agua.

Lentes. Se consiguen en ferreterías, si son sin color , mucho mejor!, te ayuda a andar más seguro – con lluvia o sin ella -. O bien, un piloto con capucha o  visera entre el casco y tu cabeza ayudará mantener seco el cráneo y a que caiga menos agua sobre tu rostro. Si vas a usar lentes, fíjate que sean anti neblina, así mientras esperas el verde en el semáforo no se empañe el paisaje.

Evitá charcos en el pavimento. No pases sobre un charco. No sabés qué hay debajo: ¿un hoyo, una tapa de OSE destapada, un cráter, o es liso? Así que mejor evitalos. Ojo con los arcoíris en la calle, son marcas de aceite que pueden hacerte resbalar. Tampoco pises hojas húmedas, son traicioneras.

Cuidado con las vueltas. Las vueltas con pavimento húmedo son maniobras riesgosas. Inclínate lo más que puedas al lado contrario de la curva y apóyate en el pedal opuesto .

Incliná más el cuerpo que la bici. Esto te permitirá dar la vuelta con una velocidad razonable, mientras el cuerpo mantiene el balance sobre la bici en tanto las ruedas eluden las líneas pintadas y hoyos. Seguir de largo o derrapar es un penal!

Usá guardabarros. No importa cómo se vea la bici, lo relevante es que no vas a llegar rociado de barro. Cuadruplicarán tu factor de confort y mantendrán clara la visibilidad. Entre más largos mejor.

Aceitá la cadena. En época de lluvias ponele un aceite más pesado a la cadena. Es mejor tener una cadena que requiera limpieza en vez de una que se atora por el polvo pegado. Recuerda, el aceite no entrará entre los eslabones hasta que la cadena esté completamente seca.

Que te vean. Con la lluvia los automovilistas se distraen y se atolondran. Es vital que te vean. Usá luces, chaleco o algún distintivo que te haga conspicuo en las calles. Las luces laterales son tan importantes como las traseras (te recomiendo un par: una en el casco y otra más debajo del sillín) como la delantera. Las luces laterales vienen bien.

Esperar 20-30 min después de comenzada la lluvia para rodar. Es mas o menos lo que tarda en “lavarse” el aceite sobre el pavimento, haciéndolo mucho mas resbaloso.